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Las tarjetas SIM rusas contarán con criptoprotección nacional


Según la información aparecida, la planta de Mikronse está preparando para comenzar la producción de chips para tarjetas SIM domésticas. Paralelamente a esto, los operadores móviles ya están probando el software correspondiente. Este paquete de hardware y software ayudará a introducir la criptografía en las redes celulares para eliminar la dependencia de tecnologías extranjeras.

Según los informes, el desarrollo y la preparación paraLa introducción de tarjetas SIM con criptografía rusa en las redes de los operadores móviles comenzó en 2013. En 2019, el Instituto de Mecánica Fina e Ingeniería Informática lleva el nombre de S. A. Lebedeva (ITMiVT) creó un módulo de software y hardware que brinda protección para las claves criptográficas almacenadas en él, y también desarrolló una tarjeta SIM correspondiente. Luego se supuso que se utilizarían chips de Samsung.

Ahora las fuentes de Kommersant informan queque el Ministerio de Desarrollo Digital quiere acelerar la introducción de tarjetas SIM rusas para eliminar los riesgos de problemas de comunicación en el contexto de la dependencia de productos extranjeros. Zelenograd Mikron fue elegido como el fabricante de los chips, y la producción en masa puede comenzar a partir de 2024.

"Chip especializado para tarjetas SIM basado enya se está desarrollando una de las plataformas para la producción en serie y los operadores están probando el software. El chip se producirá con estándares topológicos de 180 nm y 90 nm”, confirmó Mikron.

Sin embargo, se informa que, en el mejor de los casos, Mikronpodrá producir hasta 20 millones de chips al año, mientras que los operadores rusos necesitan entre 70 y 100 millones de tarjetas SIM al año. Además, los propios operadores hablan de la necesidad de probar cuidadosamente las nuevas tecnologías para el rendimiento y la correcta interacción con la arquitectura existente. Al mismo tiempo, también hablan de la necesidad de modernizar los equipos de red, pero los fabricantes extranjeros se han ido del mercado y aún no hay soluciones propietarias.